miércoles, octubre 11, 2006

11 DE OCTUBRE: DÍA DEL MARTILLERO Y CORREDOR PÚBLICO

1 comentario:

Tristan dijo...

El caso por el que me dirijo a usted es porque tengo intención de escribir varios artículos sobre los martilleros argentinos, pues sé que en Argentina el negocio de las subastas es completamente distinto, yo diría que mejor, que como lo contemplamos en España.
En España tenemos uno de los sistemas de subastas judiciales más injustos y peligrosos que hay en occidente. Injustos para con los demandados y peligrosos para los licitadores adjudicatarios, que compran las viviendas con una incertidumbre grande.
Yo soy subastero desde hace muchos años y hace tiempo me hablaron de los martilleros argentinos. Lo que quiero hacer en mi blog es un estudio sobre el sistema argentino de enajenaciones forzosas para compararlo con el sistema español.

Por ejemplo en España, tras el procedimiento judicial, la ejecución de la sentencia la practica el mismo juzgado que sentenció y también es el que celebra la subasta. Los funcionarios son a veces negligentes y a veces incompetentes y hay muchos errores que, al final provocan que la subasta sea suspendida, a veces meses después de haberse celebrado, cuando el adjudicatario ya ha pagado impuestos y ha gastado dinero en otras cosas.

Además, en los juzgados que subastan, como no ganan nada porque la licitación suba más o menos, no están interesados en que la cosa esté clara, no tienen interés en que acudan muchos postores a la subasta y no se toman interés, llegando incluso a no permitir que los posibles licitadores examinen el procedimiento para ver si hay errores que en el futuro puedan llegar a ser un problema. Por eso la incertidumbre es grande.

Los subasteros tenemos que hacer una profunda investigación por nuestra cuenta, sin ninguna colaboración por parte de los juzgados, para averiguar si la vivienda tiene inquilinos, si tiene cargas (hipotecas o embargos) que sean anteriores o preferentes, porque en España el adjudicatario tiene que asumir cualquier carga que esté inscrita anteriormente a la carga por la que sale a subasta.
En algunos países americanos eso no es así, sino que al salir a subasta, la vivienda sale completamente libre de cargas y luego la cantidad de dinero que se haya obtenido en la subasta se reparte entre los varios acreedores.

Como ves hay muchas diferencias y eso es lo que quiero contar en mi blog. Naturalmente no te pido que te pongas a escribir y me dediques dos horas de tu tiempo. Me bastaría con que me facilitases direcciones de internet en las que me pueda informar de una manera general, y si añades algo de tu propia cosecha, tanto mejor.

Querría hacer un buen estudio y te agradecerá toda la ayuda que me puedas proporcionar. Mientras eso llega, te envío un cordial saludo,
Héctor Arderíus